Pese a su corta trayectoria, Rooney es considerado como uno de los mejores delanteros del mundo. Irrumpió en la selección inglesa a los 17 años y desde entonces ha sido el centro de atención y tiene el potencial para mantenerse en la cima durante varios años.

Surgió de las divisiones menores del Everton y luego llegó al Manchester United, que lo compró después de la Eurocopa 2004, en la que jugó un rol vital para su seleccionado. Tuvo un impacto inmediato al marcar una tripleta en su debut e hizo un valioso aporte para que el United ganara tres títulos consecutivos de liga, entre 2006 y 2009.

Aunque ha sido acusado de no poder controlar su temperamento, continúa siendo uno de los jugadores más importantes para su club y su seleccionado. Es potente cuando tiene la pelota, su habilidad para buscar el balón, rematar de larga distancia y trabajo para su equipo son incomparables. La pasión con la que juega nunca puede ser cuestionada.